Las piedras hacen experto al caminante
Ningún camino sin piedras ha hecho experto al caminante es una versión propia de una frase que leí en algún muro de face y decía: ningún mar en calma ha hecho experto a un marinero. Y me llegaron imágenes de mi propia nave en medio de tormentas, en tantos momentos de mi vida.
Mirando en retrospectiva, fueron necesarias esas tormentas para crecer, evolucionar, tomar decisiones, para entender y ayudar a otros/as cuando pasan por sus propias tormentas.
Y me llegan los versos de ‘No te rindas’ de Mario Benedetti, bello poema que da fuerzas y sentido para volver a caminar.
Y si prestamos atención, veremos que en las mismas piedras del camino están las señales para sortearlas. Muchas veces pasamos de largo esas señales. Esquivamos esas piedras y solo logramos desorientarnos más, y caminar en círculos y volver a encontrarnos con las mismas piedras que dificultan el camino. Cuando finalmente caemos en la cuenta que mientras no prestemos atención a esas señales seguiremos en el mismo lugar, entonces descubrimos un camino peligroso, que asusta y atemoriza. Sin embargo, eso nos hará ser prudentes, estar alertas y finalmente reconocer que solo de esa forma pudimos descubrir un camino valioso que nos conduce a lugares que nos dan bienestar. Porque, como dice Pema Chodron– Cuando todo se derrumba – ‘todo lo que ocurre no sólo es útil y trabajable, sino que es el camino mismo.’
¿Cuáles son esas piedras en el camino?
Las piedras del camino pueden manifestarse de muchas maneras: como dificultades laborales o familiares, como enfermedades, como crisis existenciales, como sentimiento de pérdida de sentido, como frustraciones en distintos planos, como fracasos que nos desaniman y tantas otras situaciones. Si eso sucede: bienvenidas esas situaciones que nos permiten revisar dónde estamos y cómo seguir. Si no pasáramos nunca por una tormenta, no nos daríamos cuenta de nuestra vulnerabilidad y de la necesidad de fortalecernos, de buscar ayuda, de aceptarla. Nuevamente Pema nos dice que podemos ‘emplear el veneno como medicina. Podemos usar las situaciones difíciles —el veneno— como combustible para despertar.’
¿Qué piedras recordaste o re-conociste? ¿Qué aprendiste de ellas?